Este libro pretende contribuir a la interpretación, bajo la óptica de las relaciones internacionales, de episodios que marcaron los siete meses del gobierno Janio Quadros en Brasilia, interrumpido abruptamente por su renuncia el día 25 de agosto de 1961. A partir de esa fecha, han sido editadas numerosas publicaciones sobre los rumbos asumidos por la política exterior independiente pero pocas, ciertamente, tomaron como punto referencial a su idealizador y promotor, como en este trabajo. El denuedo de Quadros, a pesar de las dificultades internas, por colaborar en una nueva organización para la presencia de América Latina en el exterior, demostraba su sensibilidad hacia un mundo en transformación. Se buscaba el diálogo con actores emergentes de Africa y Asia sin marginar al hemisferio, su prioridad permanente. La revolución cubana y la defensa del principio de autodeterminación, el surgimiento del Tercer Mundo como expresión política y el agravamiento de las tensiones de la guerra fría requerían la reformulación de conceptos tradicionales de la politica exterior brasileña en la cual una coordinación más amplia con la Argentina surgia como un elemento prioritario. Transcurridas más de cuatro décadas, el encuentro presidencial Jánio-Frondizi de Uruguayana en 1961 marcaría el comienzo de un esfuerzo conjunto entre los dos países para convertirse en protagonistas y no en espectadores del escenario mundial.